jueves, 6 de noviembre de 2008


Uruguay: ley de aborto va al Senado tras apretada votación en diputadosMiércoles 5 Noviembre 2008 por María Angel
LA PRESIÓN DE LA IGLESIA SE PUDO NOTAR EN LOS NÚMEROS….OJALÁ QUE PARA OTRAS COSAS TAMBIÉN TUVIERA TANTA PRESENCIA COMO AHORA…Y QUE ESA PRESIÓN SEA SUFICIENTE PARA FRENAR EL FLAGELO DEL ABORTO…

La iniciativa general sobre salud sexual y reproductiva fue aceptada en una ajustada elección por 49 votos a favor y 48 en contra, y volvió a la Cámara Alta, que ya había dado su voto positivo en 2007. Amenaza de excomunión y veto.
El proyecto de ley de Salud Sexual y Reproductiva, que prevé la despenalización del aborto en Uruguay, volverá al Senado luego que la Cámara baja lo aprobara en general, informó a la AFP el diputado opositor Jaime Trobo.
Sin embargo, los representantes no aprobaron en particular el artículo que habla sobre la interrupción del embarazo, señaló el legislador.
El proyecto fue aprobado en general por 49 votos a favor y 48 en contra, con la presencia de 97 de los 99 integrantes de la Cámara de Diputados, pero en la votación particular del artículo sobre interrupción del embarazo el voto fue negativo, agregó Trobo.
El Senado ya había aprobado el proyecto en noviembre de 2007.
Este martes, poco antes de las 16, hora en que estaba previsto el inicio del debate, hubo una amenaza de bomba, pero las barras fueron desalojadas debido a que los activistas interrumpieron el debate.
“El desalojo fue a raíz de una controversia por el número de muertes por aborto”, dijo a AFP el diputado del opositor Partido Nacional Jaime Trobo, que votará en contra del proyecto, como todos los legisladores opositores de esa colectividad, del Partido Colorado y del Partido Independiente.
“Nosotros dijimos que según cifras del Ministerio de Salud Pública hubo dos muertes en el año, y los otros (los que defienden la despenalización) dijeron que era la mayor causa de muerte materna. Los contrarios al aborto aplaudieron y gritaron y las barras fueron desalojadas. Ya estaban advertidos que serían desalojados si interrumpían el debate”, explicó.
Los activistas no podrán ingresar nuevamente al hemiciclo en esta jornada, agregó.
Afuera del Palacio Legislativo, partidarios y contrarios a la despenalización del aborto estaban apostados lanzando consignas a la espera que los dejaran ingresar nuevamente.
La vigilia puede ser larga, pues se calculan entre 12 y 15 horas de debate, por lo que no se descarta que se vote un cuarto intermedio, dijo Trobo.
El resultado de la votación luce hasta el momento incierto, aunque se sabe que la mayoría de los legisladores de la coalición oficialista Frente Amplio votará a favor del proyecto, en tanto los partidos de la oposición lo harán en contra.
De ser así, habría votos suficientes para aprobar la norma, que ya fue sancionada por la Cámara de senadores en noviembre de 2007. No obstante, depende de la cantidad de diputados haya a la hora de la votación, pues se requiere una mayoría de los presentes.
De ser aprobado el proyecto, el presidente Tabaré Vázquez, oncólogo de profesión, dijo que vetaría el proyecto, aunque para ello necesita el acuerdo de los ministros de las carteras relacionadas (Salud Pública e Interior), o una votación en el seno del Consejo de Ministros.
La ministra de Salud Pública, María Julia Muñoz, dijo a El Observador: “Tengo que hacer lo que (el presidente) me ordene. Soy designada por él y estoy a sus órdenes”.
“Hay una profunda incoherencia: si hoy están los votos en el Parlamento es porque fundamentalmente la fuerza política que gobierna es la que aporta los votos, sería muy difícil de entender para la ciudadanía que esa misma fuerza política que está en el gobierno no respetara esa decisión”, dijo a AFP Lilián Abracinskas, abanderada de las organizaciones que impulsan la legalización del aborto, en referencia a un eventual veto del Poder Ejecutivo.
En Uruguay se consuman anualmente 33.000 abortos, según datos que manejan el Parlamento y la Asociación Uruguaya de Planificación Familiar.
A nivel judicial se estima que la cifra real es más del doble y que la práctica clandestina deriva anualmente en medio centenar de procesamientos y casi una docena de muertes.
El debate se desarrolla asimismo bajo una amenaza de excomunión de parte de la Iglesia Católica contra aquellos legisladores que voten a favor de la norma.
La legislación vigente desde 1938 sólo admite el cese del embarazo por violación o riesgo de vida de la madre, y prevé penas de prisión para los autores de abortos, consentidos o no.
Según un sondeo realizado este año por la empresa privada Cifra, 49% de los uruguayos consultados está a favor de la despenalización del aborto y 39% en contra.
El arzobispo de Montevideo, Nicolás Cotugno, dijo que esos legisladores quedarán “excomulgados ipso facto” y que iniciará un proceso de excomunión formal con el Papa Benedicto XVI y el episcopado, generando la ira de todo el sistema político.

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